martes, 29 de septiembre de 2015

Libro EL AYUNO DE DANIEL -Capítulos 12 y 13 -





Capitulo 12

No Es Digno De Mi
La conciencia  pura de la fe no permite que nada, absolutamente nada, coloque en riesgo la salvación eterna del alma. Pasiones  emotivas,  apegos del corazón en relación a los seres queridos, como hijos , madre , padre, marido, esposa, novio, novia, reputación, bienes materiales, en fin, hasta mismo la propia vida, no pueden interferir en nuestro buen relacionamiento con El Señor Jesucristo.
El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.(Mateo 10:37-38).Cualquier sacrificio, por mayor que sea, es insignificante cuando se trata de la salvación eterna del alma.

 El Señor Jesús no considero su propia posición divina, para asumir la condición de maldición en la cruz, con el fin de salvar a los que creen. Quiero decir, El coloco toda Su fuerza, honra y gloria para salvarnos. El no midió sacrificio para esto. ¿Cómo aceptará que quedemos jugando con la salvación de nuestra alma? Esta escrito:  Y  el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.(Apocalipsis 20:15).
Siempre tenia y tremí por mi propia salvación, el Espíritu Santo me había convencido de que no servía ganar el mundo entero y perder mi alma, conforme está escrito en Mateo 16:26. Esta palabra hizo que naciera en mí un temor sin precedentes, sumado a la profecía de Ezequiel, hacia que yo me sintiera aun mas advertido por el Espíritu Santo, con respecto a mi bien mayor:
“ Y tú, hijo de hombre, di a los hijos de tu pueblo: La justicia del justo no lo librará el día que se rebelare; y la impiedad del impío no le será estorbo el día que se volviere de su impiedad; y el justo no podrá vivir por su justicia el día que pecare. Cuando yo dijere al justo: De cierto vivirás, y él confiado en su justicia hiciere iniquidad, todas sus justicias no serán recordadas, sino que morirá por su iniquidad que hizo. Y cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; si él se convirtiere de su pecado, e hiciere según el derecho y la justicia, si el impío restituyere la prenda, devolviere lo que hubiere robado, y caminare en los estatutos de la vida, no haciendo iniquidad, vivirá ciertamente y no morirá. No se le recordará ninguno de sus pecados que había cometido; hizo según el derecho y la justicia; vivirá ciertamente.” (Ezequiel 33:12-16).
Si usted piensa que su salvación está garantizada , este versículo deja bien claro que no!.

Capitulo 13

Los Cielos se Abren
Bautizado Jesús, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.(Mateo 3:16)
El Espíritu Santo no es para curiosos o aventureros, hipócritas, religiosos, para carnales; El Espíritu  de Dios es para vacios, carentes, y sobre todo sedientos de dirección divina. Para vagabundos en busca de algo superior a todo lo que este mundo les ofreció.
Jesús vino para cumplir una misión especial. Aun así, El tuvo que pagar el precio: sacrificó. Para realizar tal misión, renuncio su familia,  su juventud, amistades y novia. El mismo necesitaba la dirección del Espíritu Santo para cumplirla, imagine aquellos que desean hacer Su voluntad y realizar Su Obra!
Lo mejor de todo es que antes de recibir el Espíritu Santo, Su mente y corazón ya eran inspirados por El. Lo mismo pasa con todos los poseídos en la fe del Ayuno de Daniel. ¿ Usted piensa que su gran deseo de recibir el Espíritu Santo vino de la nada? No! Y mil veces no!. El nació dentro de usted por obra del propio Espíritu de Dios. “porque Dios es el que produce en ustedes lo mismo el querer como el hacer, por su buena voluntad.”(Filipenses 2:13)
Así como los cielos se abrieron sobre Jesús, también se abrirán sobre su cabeza, para que reciba el Espíritu de Dios. Al final, El es la promesa del Señor Jesús, para sus seguidores.
Probablemente, usted no verá una paloma descendiendo sobre su cabeza, ni sentirá cosa alguna, tal vez ni hable en lenguas extrañas. No importa. Nada de esto es relevante. Lo importante es: si hay renuncia total del mundo (ayuno mental) y sinceridad en la búsqueda, entonces hay fe.
Y si hay fe, los cielos ya están abiertos sobre su cabeza. “…Los ojos del Señor están contemplando toda la tierra, para mostrar su poder a favor de los que mantienen hacia él un corazón perfecto”( 2 Crónicas 16:9).
 Observación: En este momento, busque un lugar asolado, y enseguida, haga esta oración: Mi Dios y mi padre, en nombre del Señor Jesús, yo entro en tu presencia para busca y recibir la promesa que dice que  en los últimos días el Señor derramaría de su espíritu sobre toda carne. Juan Bautista enseño que el Señor Jesús es quien bautiza con el Espíritu Santo. Entonces, yo te suplico, mi Señor, mi Salvador y mi Dios, bautízame AHORA CON TU ESPIRITU! Amén.




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