
Hay algunas personas que sirven a las otras, y hay otras que les gusta ser servidas. Verdaderamente “el servir“ se applica a muchas cosas y no solamente en la acción de hacer un favor a alguien, o estar a la disposición de alguien, o tornarse un siervo (a) de Dios...
En esta semana yo leí algo que realmente me bendijo muchísimo y me gustaría pasar a ustedes lo que el Espíritu Santo me ha enseñado. Siempre hablamos de humildad y muchas veces pensamos que sabemos lo que esto significa de verdad, pero no sabemos exactamente lo que es ser humilde.
En la biblia está escrito “Ahora que yo, soy Señor y maestro, vos lavo sus pies.....” (Juan 13:14) Este mensaje tiene un significado magnífico y que nos enseña mucho “como servir”. Jesús en aquel momento que lavó los pies de sus discípulos, Él lo hizo con humildad en la presencia de los otros, no porque Él poseía un auto-estima. Él escogió servir sus apóstoles porque Él tenia la consciencia de quien Él era; Jesús era suficientemente confiante para asumir el papel de servidor. Él sabía que el estatus y el poder no iban hacer de Él una persona importante mejor que los otros, pero lo que hacia de El una persona importante fue su capacidad de servir a los otros.
Todo el tiempo que Jesús estuvo con sus discípulos y también junto al pueblo era siempre sirviendo, orientando, ayudando, curando, y enseñando.
Miramos que Jesús no fue ningún medico o doctor. Él no tuvo en la tierra ninguna posición privilegiada donde podría solamente comandar, al contrario, Él siempre estuvo en el medio del pueblo para servir. !Es maravilloso! !Además de entregar su propia vida por nosotros, no tenemos mejor ejemplo de humildad que esto.
Desafortunadamente el mundo nos enseña prácticamente el contrario, vemos tanta corrupción peleas a causa de la conquista de poder, posición, desavengas, personas dejando de servir a Dios, porque perderán una posición en este mundo. Siendo que nuestro Dios jamás tuvo alguna posición en este mundo, pero se torno un referencial importante y ejemplar a causa de su condición de servidor. !És muy fuerte!
Algunas personas están siempre listas para ayudar las otras, siempre con la mano amiga para extender, y no solamente aquellas personas que podrían dar algo de regreso, pero también sirviendo aquellas que no tienen nada para ofrecer. Y hay veces que muchos de nosotros nos engañamos, perdemos las almas, las bendiciones y oportunidades de ser bendecidos. Es muy fácil y cómodo servir alguien que tiene algo para ofrecernos. A veces en nuestro trabajo, para el gerente que es superior. Hacer lo mejor para quien tiene algo para darte, ?donde está el sacrifico? Pero servir un amigo aquel que está en la misma posición ciertamente la condición de servir es bien diferente, a veces estamos en la condición contraria, somos aquel que tenemos una posición favorable y nos olvidamos que también somos siervos unos de los otros. Y tenemos que también servir y acordamos que tenemos el Señor que nos dio el ejemplo de ser un servidor.
La verdadera humildad es dar importancia a la otra persona, sin nos considerar disminuidos en relación a otros , es realmente tener actitudes debido al amor que sentimos por nuestro prójimo.
Jesús no quería ganar prestigio o la gloria de este mundo, y tampoco hacerse mejor que los otros. Pero a través de su humildad Él dio la condición a cada uno de nosotros ser capaces de tornarnos personas buenas y amados por Él. Y esto tenemos que aprender a hacer en relación a las personas que están a nuestro lado, hacerlas sentir amadas, y no despreciadas, hacer ellas sentirse capaces y no despreciadas y no humilladas llevando así el verdadero amor de almas.
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